Como representantes trabajadores y trabajadoras de la educación expresamos nuestro enérgico rechazo al proyecto de ley que pretende eliminar la protesta social.
Lamentamos que un gobierno que se dice ser nacional y popular impulse legalizar la represión de la protesta social y sindical, profundizando las acciones de la Ley antiterrorista y la investigación clandestina de dirigentes que no comulgan con el gobierno de turno.
No es casualidad que esta iniciativa se impulse en un contexto de devaluación, inflación, achique, pérdida de puestos de trabajo y del poder adquisitivo, donde los sectores populares y los y las trabajadores/as resistimos ser nuevamente la variable de ajuste y perder derechos conquistados.Una vez más el poder hegemónico intenta solapadamente amordazar a los que reclamamos, profundizar la judicialización de la protesta, engrosando así el listado de dirigentes procesados que en la Patagonia ya superan más de 2000 compañeros/as.
Reivindicamos lo establecido en nuestra constitución nacional como el derecho a huelga, a peticionar, la libertad de expresarnos y proponer cambios para una verdadera justicia social y una justa distribución de la riqueza.
Cuando la clase política represente el sentir y las necesidades del pueblo, cuando se trabaje por el bien común, el bienestar de la ciudadanía en general y no de unos pocos y se mejore la calidad de vida de los y las argentinos/as esa serán las políticas que limitaran las protestas sociales, con pleno empleo y una verdadera inclusión social.
Los trabajadores/as de la educación no queremos volver a tiempos pasados, de persecuciones, de ajustes, de desempleo, de pasar de un estado benefactor a un estado ausente, queremos ser escuchados y ser artífices de nuestro destino.
General Roca – Fiske Menuco, 19 de abril de 2014.
Mario Floriani
Secretario General
UnTER