En cada acción por los Derechos Humanos, Nora reivindicó el compromiso social que sostenían lxs jóvenes como su hijo y se sumó a esos sueños colectivos. Acompañó siempre la lucha en defensa de la educación pública, y en la región participó de audiencias y charlas por el juicio en el caso Daniel Solano y la violencia institucional. Marchó con el pueblo mapuche hacia Viedma para reclamar por el proyecto de modificación de la Ley de Tierras. También acompañó cuando la prefectura asesinó a Rafael Nahuel y apoyó las acciones contra el extractivismo.

Norita, Madre y Maestra, ha partido fisicamente a los 94 años, el 30 de mayo de 2024. Lxs trabajadorxs de la educación continuamos el camino de la pedagogía de la memoria que trazó y recordamos sus palabras al recibir el premio de honor Democracia, un reconocimiento al compromiso y las formas de resistencia, “(…) Dedicárselo a las Madres que caminamos juntas que no están pero que formamos un colectivo de defensa de la democracia cuando el país hacía fuego, sin embargo, fuimos las primeras feministas de esa época de terror. Fuimos a la Plaza de Mayo dejando todo, buscando nuestros hijos y nuestras hijas no midiendo el peligro. (…) la desaparición forzada de personas es igual que si te amputan una parte del cuerpo, sangra toda la vida, la sangre las Madres la revertimos en lucha”.