El CCCVIII Congreso de UnTER sesiona en nombre del compañero Pascual Mosca y la compañera Ofelia Idoeta, de Cinco Saltos, reconocidos por su militancia sindical, que nos enseñaron el respeto por la diversidad de ideas y la importancia de luchar por un objetivo común: La defensa de los derechos de trabajadores y trabajadoras. A la vez que participaron activamente de diferentes espacios político partidarios, ambos ayudaron a consolidar la UnTER en Cinco Saltos, y con su ejemplo comprendimos que para un militante, más allá de los partidos siempre la prioridad es el sindicato.
Expresa su repudio al genocidio palestino perpetrado por el gobierno de Israel. Genocidio que se cobró la vida de cientos de civiles, la mayoría niños y niñas, víctimas de una guerra generada por intereses geopolíticos y silenciado por los organismo internacionales.
Recordamos el Día Internacional del Detenido/a Desaparecido/a y reivindicamos los años de resistencia de los pueblos que permiten la persistencia de la memoria en busca de justicia. Como en nuestro país, la lucha incansable de las Abuelas ha permitido recuperar a 115 nietos y nietas, y a través de ellos reconstruir la vida y militancia de los 30.000.
El compromiso con esta historia nos hace repudiar la represión en la Toma Papa Francisco, con el objetivo de desalojar a las familias de los sectores populares, cuyos derechos básicos son violentados cotidianamente, en un contexto donde se naturalizan estas prácticas represivas. Igual que en Buenos Aires, en Cipolletti las familias de los barrios Obrero A y B y Los Sauces padecen la angustia de no saber cuándo perderán sus hogares por orden de una justicia más preocupada en proteger la propiedad privada que la vida digna.
Esta dicotomía entre el culto a la ganancia y el respeto por la condición humana, se vio reflejada también hace un año cuando las organizaciones sociales y sindicales salimos a repudiar el acuerdo Chevrón – YPF, en defensa de la vida actual y futura, por la protección de nuestros recursos naturales. El Estado puso en funcionamiento la represión, desperdigó las balas, en defensa de los intereses corporativos y continua hoy con el armado de las causas contra los compañeros que participaron de la manifestación.
Mientras tanto, la comunidad de Allen padece las consecuencias del Fracking que incendia las chacras, destruye la economía de los pequeños productores y en los campos, se avasalla los derechos ancestrales de las comunidades hermanas.
Observamos con preocupación cómo la policía de Río Negro, mantiene viejas prácticas represoras, en las que supo acunarse los años funestos de la dictadura, avalada por un gobierno que no respeta sus propias leyes y que no castiga a quienes, dentro de las comisarías actúan impunemente. Amparados en su uniforme, haciendo alarde de su impunidad, la policía de Cipolletti vuelve a violar los derechos de nuestros jóvenes, esta vez con la detención y apremios contra Alejandro Jaramillo, integrante del Observatorio de Derechos Humanos, cuando intentó proteger a dos adolescentes. Lo salvó la rápida intervención de integrantes del Observatorio, sin embargo ahora debe afrontar una causa penal armada por sus agresores.
Tan complejo y peligroso es el avance de los aparatos represivos del Estado, cuando, habilitados por el Ministerio de Educación y Derechos Humanos ingresan a las escuelas exigiendo las listas de docentes que hicieron paro, como sucedió en El Bolsón. O acuden a la casa de un compañero y a la seccional indagando sobre los nombres de quienes participaron de la última movilización a Viedma, como sucedió en Valcheta. Reflejo de esta acción conjunta es darle cabida a la denuncia de la delegada Beatriz Benítez contra compañeros/as permanecieron frente al edificio de la delegación de Sierra Grande, durante las jornadas de protesta mandatadas por Congreso. Denunciamos al gobierno de Río Negro por estas acciones reñidas con la democracia y el Estado de derecho. Mientras el Secretario de Gobierno, Luis Di Giacomo tilda a los trabajadores/as de golpistas y desestabilizadores, permite por omisión que el aparato policial persiga a quienes ejercen su derecho a reclamo.
El derecho social a la educación se defiende también, garantizando el normal funcionamiento de los organismos encargados de la coordinación del sistema educativo. Por ello, exigimos la inmediata reorganización del sistema administrativo en Educación: La acefalía de Delegaciones, como sucede en Jacobacci, impide la continuidad del mantenimiento de las escuelas, por no existir un interlocutor válido, sumado a esto la vigencia de la Res. 652, deja a los equipos directivos, en absoluta soledad frente a los numerosos problemas que surgen en las escuelas.
Además, así como repudiamos el autoritarismo reflejado en la figura de la delegada de Sierra Grande, también denunciamos la inacción de la coordinación de El Bolsón frente a la acuciante realidad que padece la comunidad educativa de Ñorquinco y la desidia en Roca que durante meses impidió el normal dictado de clases en el CET 17, y mantiene dispersos de las y los estudiantes de la Escuela 32, entre otras problemáticas.
La falta de organismos de control permitió que durante años estudiantes y trabajadores/as se encontraran expuestos al PCB, como sucede en el CET 6 de Viedma, agravado por la negligencia de funcionarios que para ocultar lo evidente, prefirieron quitar los transformadores a escondidas, sin respetar la medidas de seguridad, y de esta manera, empeoraron el problema, sin proponer una solución ni un acompañamiento efectivo a la comunidad. Frente al abandono del Estado reconocemos el trabajo del grupo de madres que vienen haciendo un seguimiento del tema judicial. Junto a ellas, logramos las refacciones en la escuela, y descubrir el peligro de los transformadores.
La situación actual, lamentablemente es la continuidad de un modelo que denigra a la educación pública, antes y ahora se mantienen los negociados. Ejemplo de ello, es la cobertura del seguro para estudiantes y trabajadores, en su momento fue la Caja, hoy es Horizonte, mientras ellas ganan, dentro de las instituciones estamos en riesgo. Exigimos una cobertura real y efectiva para el conjunto.
En este marco de corrupción y desidia, podemos enmarcar al órgano más caro de la provincia, el Tribunal de cuentas, que tarda dos años para investigar y perseguir a directores y directoras, haciéndoles pagar por faltantes en las escuelas, cuyo monto ronda los 400 pesos, acusándolos de causar daños por negligencia a la provincia, mientras cajonea o hace caso omiso a las denuncias contra funcionarios/as que mantienen cargos fantasmas cobrando un honeroso salario o aquellos, que con su impericia dejan a las escuelas desprotegidas.
Repudiamos el accionar de la Directora de Nivel Secundario Marta Seguel, quien envió a las escuelas una nota via jerárquica pidiendo adhesiones contra la expulsión de la UnTER del ex ministro Mango, el desconocimiento del paro mandatado por Congreso. Es grave, no solo por su condición de afiliada, sino porque esta nota evidencia lisa y llanamente el abuso del poder vigente en el Consejo Provincia de Educación.
También resulta preocupante, las publicación reciente de resoluciones firmadas por Mango antes de irse, sobre la creación y convocatoria a concurso para cargos de Secretarios/as, de manera contraria a la ley 391, Estatuto del Docente, la resolución 1700/92 y las normas de funcionamiento de las Juntas de Clasificación. Mango intentó de manera perversa, dejar una normativa que generarían discusiones y divisiones inútiles dentro de las instituciones, defendemos el derecho a la estabilidad laboral y al ascenso, pero con reglas claras democráticas.
El compromiso y la lucha por una educación pública y popular tiene innumerables aristas, sin embargo reconocernos como trabajadores y trabajadoras de la educación es nuestro orgullo y nuestra señal de identidad. A pesar de los pesares cada vez que atravesamos la puerta del aula apostamos por una sociedad más justa y solidaria. Cada vez que nos volcamos a las calles, codo a codo reclamando por nuestros derechos seguimos educando, porque no hay maestro cierto que no eduque con el ejemplo.
Junto a nuestros estudiantes, llevando a la práctica que todo acto educativo siempre es político enseñamos y aprendemos que no existen las salvaciones individuales, que los logros siempre son colectivos, que animarse a soñar es tan revolucionario como la esperanza y que justamente eso es lo que ha permitido a los pueblos su liberación. Feliz día para todos y todas.
Comisión de prensa CCCVIII Congreso Extraordinario, Cinco
Saltos 29 de agosto de 2014:
Pablo Holzmann, Roca
María Elena Troncoso, Jacobacci
David Tapia, Cinco Saltos
María Inés Hernández, Secretaria de prensa, comunicación y cultura CDC
