Gualberto murió en un hospital de la ciudad de Salta, en la madrugada del 3 de abril de 2018. Llevó a juicio a los policías por la privación ilegítima de la libertad y homicidio calificado a su hijo Daniel Solano de 26 años, la madrugada del 5 de noviembre del 2011 en Choele – Choel.
Seis años y medio se esperó para el juicio que se desarrolla en tribunales de Roca – Fiske Menuco. La impericia permitió que se cruzara en los pasillos con los policías acusados. Siempre aseguró, junto a su familia que el secuestro de Daniel se debió a que propuso a sus compañeros protestar por los bajos salarios. El joven viajó a Río Negro desde Tartagal, Salta. De origen guaraní, fue contratado por la empresa Agro Cosecha SRL para trabajar en Expofrut Univeg.
La desaparición de Solano dejó al descubierto muchas irregularidades, incluso mezcladas con intereses económicos. De la causa original se desprendieron más de 20 investigaciones paralelas por desaparición de personas, trabajo esclavo, trata de personas, connivencia policial, empresarial, judicial y política, desprecio a comunidades originarias y a inmigrantes.
Gualberto encabezó el reclamo de justicia y la busqueda de su hijo Daniel. Lo vimos y compartimos con él en el acampe que realizó frente al Juzgado Nº 30 de Choel Choel y en una de las jornadas en el Jagüel. La tristeza e impotencia, porque falleció sin encontrar el cuerpo de su hijo, se convierte en compromiso por justicia y denuncia en contra de la impunidad. Gualberto y Daniel Sonalo, ¡Presentes!
Gral. Roca – Fiske Menuco, 3 de abril de 2018.
Viviana Orellano, Secretaria de Derechos Humanos, Género e Igualdad de Oportunidades
María Inés Hernández, Secretaria de Prensa, Comunicación y Cultura
Benjamín Catalán, Secretario Gremial y de Organización
Marcelo Nervi, Secretario Adjunto
Patricia Cetera, Secretaria General
Foto: UnTER Central, 25/01/18. En el campo La Manuela, jornada de bajada al jagüel¨.