Después de convertir la Legislatura en un escándalo con puertas valladas de policías, sin la oposición en el recinto y con la complidad de los nuevos “Radicales”, otrora integrantes de la oposición, como Colona, Pinaso, Muena y Lueiro, el oficialismo definió aprobar su presupuesto de ajuste e iniciar el conflicto con los estatales de la provincia.
En la calle los trabajadores ratificaron la unidad y profundización de las estrategias para torcer el erróneo camino planteado por Saiz, denominado como el “nuevo gobierno”.
Medidas inconsultas, debates censurados, decisiones en función de acuerdos espurios y no del interés colectivo son características esenciales de este gobierno, que el viernes 30, en un acto más que formal de hipocresía festejará 50 años de la Constitución Provincial con ostentosos discursos democráticos que jamás llevarán adelante, si no abandonan la visión y práctica neoliberal de Menem que acompañaron en su momento y prolongan a estos días.
La sociedad rionegrina observa atentamente al gobierno de Miguel Saiz, cuáles serán sus pasos para solucionar la crisis del Ipross, si ratifica su proyecto reduccionista o abrirá el debate con toda la información y el tiempo necesario para dar respuestas de fondo a los afiliados.
Jueves, 29 de noviembre de 2007
Pedro Bichara, Secretario de Prensa
Marcelo Nervi, Secretario General