Comenzada una nueva etapa política en nuestro País nunca hubiera imaginado que desde las esferas más importantes de las autoridades educativas y políticas, incluyendo al reciente electo presidente de la Nación, que se cometieran errores conceptuales tan graves.
Me refiero al Decreto Nacional N° 13/15, el cual determina la estructura general de Ministerios, entre los cuales figura el nuevo para Educación que, para esta definición pasa a ser MINISTERIO DE EDUCACIÓN Y DEPORTES que le compete asistir al Presidente de la Nación y al Jefe de Gabinete de Ministros en orden a sus competencias, en todo lo inherente a la Educación, de conformidad a lo establecido por las Leyes Nros. 24.195, 24.521, el Pacto Federal Educativo (Ley N° 24.856) y a las demás leyes y reglamentaciones vigentes y que se dicten en consecuencia, y al Deporte.
Al empezar el texto del correspondiente Artículo 23 uno puede imaginar que existe desconocimiento de quien redactó la norma y de quien la firma porque desde el inicio se menciona que todo se hará de conformidad a lo establecido en la Ley 24195, que es la Ley Federal, y que desde el año 2006 se dejó sin efecto al sancionarse la Ley 26206, Nacional de Educación. La mención a la ley 24521 hace referencia a la de Educación Superior sancionada en el año 1995, aún vigente desde la época menemista, y el Pacto Federal Educativo que fuera aprobado en el año 1997, de lo firmado en 1994.
Como se ve claramente quienes redactaron este adefesio normativo que firma el Presidente a través del Decreto ya mencionado reduciría a la mitad la inversión del PBI en el área, restablece el Polimodal y elimina las escuelas técnicas y las paritarias, al menos todo ello en el imaginario veloz de quienes tuvieron la rapidez en escribir el texto cuestionado, ya que la inversión del PBI en educación pasará del 6 al 3%. Todo se puede pensar en función de mantenerse esta agresión legislativa. Menos inversión, menos Educación. ¿Para qué se quiere la Educación Técnica?. Quienes redactaron este texto vivieron en los últimos 25/30 años en una isla sin información, o no tienen idea alguna del sistema educativo o tienen claramente definido el camino a empujar.
A pesar de los compromisos del nuevo Ministro, a la Conducción Nacional de CTERA, de modificar lo que supuestamente fue un error, hasta la fecha no ha existido tal modificación.
Esta actitud desde la firma del decreto con estos “errores”, el tiempo transcurrido sin salvar inmediatamente los mismos y la inexistencia de un pedido inmediato de disculpas públicas hace claramente pensar que la intención se encuentra en esa línea de pensamiento. Volver a los 90, privatizar el sistema educativo, no gastar en educación, y preocuparse menos por la formación docente. El Dios Mercado regulará todo.
En honor a las grandes luchas docentes, a los compañeros caídos y desaparecidos y a todos los y las que lucharon denodadamente para instalar en el País, desde el siglo pasado, la conciencia de un proyecto educativo nacional, con presupuesto sostenido y permanente, con responsabilidad indelegable del Estado va nuestro enérgico repudio a la pretendida imposición de borrar con un simple Decreto largas historias de debate definidas en claras leyes sobre el Sistema Educativo y la Escuela Pública.
Somos parte de una historia que no permitiremos que se nos vuelva a pisotear.
Héctor Roncallo –Legislación Educativa
Diciembre 21 de 2015