Educación en Río Negro, como barco sin timonel
La inscripción virtual, último intento del gobierno para imponer su proyecto de la Nueva Escuela Secundaria en Río Negro, aparece en estos días como una mala comedia de enredos. Cada uno con su propio guión, pero el director no aparece. El problema es que el conflicto está en el Ministerio de Educación y Derechos Humanos. ¿El poder lo tiene Silva, Ribodino o funcionarias de tercera línea? ¿Con este mismo criterio discutieron el modelo de la ESRN, armaron el diseño curricular y el proyecto de trayectorias escolares? ¿En manos de quién se encuentra el destino de 70.000 estudiantes secundarios y las garantías laborales de las y los docentes?